Según datos de 2014 del Ministerio de Industria, el 95,7% de las empresas en España son microempresas con 0-9 trabajadores. Si nos comparamos con los datos de la Unión Europea, las microempresas en España suponen 3,6 puntos por encima de la estimación disponible para el conjunto de la UE en 2012 (92,1%).
Los estudios de #arquitectura no son una excepción, su tamaño medio en nuestro país según la directora ejecutiva del premio Pritzker, Martha Thorne, es de 5 personas. Esa dimensión reducida (que yo diría que en realidad es todavía más reducida) junto con la escasa especialización dificulta su internacionalización en un momento en el que la crisis económica obliga a buscar proyectos en el exterior.
Es clave la búsqueda de una diferenciación:
Una diferenciación que vaya más allá del servicio y la proximidad, que ofrezca aquello que necesitan nuestros posibles clientes donde éstos lo necesiten: la Ventaja Competitiva, es decir, qué puede ofrecer mi empresa al mercado que no lo puedan hacer, mayoritariamente, mis competidores. Adelantarnos a los demás estudiando a nuestra competencia y aprendiendo de sus logros pero también de sus errores. Innovando, pensando en mejores y más eficientes productos que nos permitan vender nuestros proyectos. Conceptos éstos a los que nuestro sector no estaba acostumbrado (Ventaja Competitiva, Innovación, Competencia, Productos, Venta) pero que habrá de acostumbrarse rápidamente.
Trabajar colaborativamente:
Deberemos aprender a trabajar en colaboración con otros y, en muchas ocasiones, a distancia; formando redes y alianzas que nos permitan tener más tamaño aparente. Para ello deberemos establecer las reglas del trabajo y hacerlo por escrito: quién hace qué y cómo se hacen las cosas, la metodología. Y además, confiar, delegar, compartir, ser generoso y trabajar en equipo.
En nuestro grupo de LinkedIn también encontrarás contenido de valor.