La evolución en general y las tecnologías en particular, junto con la aparición en redes sociales de los influencers, están propiciando nuevas maneras de trabajar y nuevas oportunidades.
Fuente: Freepik
Las redes sociales son ya un instrumento importante y a veces imprescindible para dar a conocer el trabajo que desarrollamos ya sea como profesionales o como empresas. Pueden incluso convertirse en nuestro trabajo o parte de él si decidimos convertirnos en influencer (*) y promocionar así unas determinadas empresas.
(*) Un influencer es una persona que cuenta con cierta credibilidad sobre un tema concreto, y por su presencia e influencia en redes sociales puede llegar a convertirse en un prescriptor interesante para una marca. No todos los influencers encajan con una determinada empresa, es decir, con la estrategia de Inbound Marketing de ésta.
Si tomamos esta decisión, antes que nada, habremos de definir por escrito qué queremos transmitir, a quién y, en consecuencia, dónde y para qué, establecer qué queremos conseguir con ello: un posicionamiento, llegar a unos determinados clientes, monetizar nuestro esfuerzo, etc.
Muchas veces, en una primera etapa, el objetivo no es ganar dinero, pero, la mayor parte de las veces la monetización se impone con el tiempo. Y ser prudentes, las redes sociales pueden ser adictivas y muchos publican por publicar, anteponiendo cantidad a calidad. También es importante precisar a priori el tiempo que vamos a invertir en ello, ser constantes, ambiciosos pero realistas. Por una cuestión de orden personal, de organización, pero también para crear una pauta en nuestros futuros seguidores.
Os propongo los siguientes pasos:
El trabajo previo
Establecer un objetivo tangible, como he dicho, ambicioso pero realista.
- Tema: En qué voy a ser experto
- Subtema: Qué conocimiento voy a compartir y a crear
- Mercado: Qué volumen de seguidores/followers quiero tener
- Planning: En cuánto tiempo
- Inversión: Cuánto tiempo le voy a dedicar al día, semana, mes y al año. Qué presupuesto voy a asignar para ello
- Formación: Qué conocimientos necesito (no despreciar nunca) o qué perfil tengo que tener
- Evolución: Cómo voy a analizar, medir y mejorar (imprescindible para mejorar de manera continua)
Una vez hayas contestado y preparado en profundidad estas cuestiones, hay que arrancar el plan de acción, meterlo en la agenda (hay que escribirlo) y cumplirlo.
La Marca y Producto
Es fundamental que sea una marca sólida y seria. No todo vale. Y, vas a estar unido a ella, así que ¡sé prudente! Es muy importante probar y comprobar sobre lo que vas a hablar. Tu credibilidad está en juego y el mercado no perdona. Se ha de compartir los valores de la empresa y creer documentadamente, en la bonanza del producto.
Imágenes de apoyo y storytelling
Una imagen vale (y cada día más) más que mil palabras. Hay que saber apoyar y contar con imágenes nuestro discurso. Cuanto mayor interés generes en lo que escribas y más lo trabajes creando un contenido interesante, más captarás la atención de tu audiencia y más se divulgará éste.
Momentum
Hay que adecuar el contenido al momento en que se vaya a publicar, que sea actual.
Estar al día de todas las novedades. Una vez que te haces experto influencer, has de estar al día de todo lo que acontece y las mejoras o modificaciones que realizan las redes en las que tengas influencia.
Alinéate con otros influencers
El concepto de competencia ha cambiado. Hoy prevalece la unión para ser más fuerte, para aprender y crecer: el win-win, hay que saber aprovechar la existencia de otros influencers para alinearse envés de competir.
Analiza
Para que nuestro trabajo sea sostenible en el tiempo es imprescindible reflexionar, medir y proponer continuamente a la empresa desde un análisis profundo, riguroso y argumentado.
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